Comunidades nativas fronterizas celebran acceso a alfabetización y nuevas oportunidades para leer y escribir
“Nunca antes tuvimos la oportunidad de educarnos; ha llegado la hora y agradecemos ese respaldo”, afirmó Richard Joaquín Santa Cruz, jefe de la comunidad nativa de Tsirotiari, en la frontera con Cusco. Con estas palabras, expresó el impacto positivo del proyecto “Aprendiendo y Produciendo”, que busca alfabetizar a más de 20 pobladores asháninkas de esta zona remota.
La iniciativa brinda acceso a la educación básica en lectura, escritura y matemáticas, fomentando un ambiente lúdico y colaborativo. Este esfuerzo está destinado a cerrar brechas en comunidades históricamente olvidadas, fortaleciendo sus capacidades para enfrentar los retos de la modernidad.
El promotor Víctor Olarte Espinoza desempeña un papel fundamental, ingresando cada semana a la comunidad para impartir clases durante tres días consecutivos. Su dedicación y cercanía han ganado la confianza de los asháninkas, consolidando la efectividad del proyecto.
“Nos sentimos atendidos y no olvidados. Esta es una gran oportunidad para nuestra comunidad”, expresaron los participantes del programa, agradeciendo al Gobierno Regional por hacer posible este cambio significativo en sus vidas.
Durante una reciente visita de monitoreo, el Supervisor Zonal Fredolino Corilloclla destacó la excelente respuesta de la población y el impacto positivo del proyecto, reafirmando el compromiso de continuar llevando educación a las zonas más alejadas del VRAEM.